Cómo la tecnología destruye empleo

Las personas se están quedando atrás, porque la tecnología avanza tan rápido que nuestras habilidades y organizaciones no están a la altura. Esta es la "gran paradoja"







El robot de cuello azul

Erik Brynjolfssen y Andrew McAfee ambos profesores del MIT, ven un futuro oscuro para muchos tipos de trabajo.

No sólo en la industria manufacturera, o en los despachos, sino también en profesiones como el derecho, los servicios financieros, la educación y/o la medicina.Ellos creen que el cambio tecnológico que se ha producido tan rápido, ha destruye mas rápidamente puestos de trabajo que los que crea, los que contribuye al estancamiento de los ingresos medios, y el crecimiento de la desigualdad. En economía, la productividad, la cantidad de valor económico creado por unidad invertida, como puede ser la hora de trabajo, es un indicador clave del crecimiento y de la creación de riqueza. Es una medida del progreso.

Después de la Segunda Guerra Mundial aparecen dos aspectos muy claros: aumento de puestos de trabajo y aumento de la productividad.

A partir del año 2000 divergen productividad y empleo destruyéndose este último de forma rapidísima. En el año 2011, aparece una nueva brecha, entre el crecimiento económico pero sin creación de empleo.

Brynjolfsson y McAfee a esto le llaman "la gran disociación". Ellos creen que la tecnología aumenta la productividad y hace a las sociedades más ricas, pero también tienen su lado oscuro: el progreso tecnológico permite la eliminación de muchos tipos de trabajo y sacar fuera del mercado de trabajo al típico trabajador de antes y por lo tanto el crecimiento de la desigualdad.

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